La tendinopatía para entenderlo de forma más sencilla es la inflamación crónica de un tendón o varios tendones que permiten la movilidad de un músculo. Es un trastorno musculoesquelético que, a lo largo de un período de tiempo, comienza a tener dificultad de movimientos. A raíz de la actividad continuada se generan microrroturas que provocan la inflamación tendinosa, la más frecuente se produce en el hombro, más concretamente en el derecho ya que puede haber más factores relacionados, aunque también se han visto afectados por esta dolencia las rodillas, tobillos o cualquier articulación que ejerza la rotación.
Como hemos mencionado antes, la inflamación es la principal consecuencia de este problema y el primer síntoma, la complicación a la hora de mover la zona molesta, la alteración de la sensibilidad y el dolor cada vez que intentas hacer algún giro son el resto de indicios que pueden llevarte a la conclusión de una posible tendinopatía rotuliana, también puedes haber escuchado sufrir una tendinopatía del supraespinoso, una alteración estructural del tendón de dicho músculo, que se encarga de subir el brazo de forma lateral hacia arriba forzando el hombro.
¿Cómo se produce?
El hombro es la zona del cuerpo más propensa a este tipo de lesiones, por tanto, focalizaremos en este punto concreto para explicar a qué se debe.
No es sencillo aprender el desempeño de las articulaciones por la dificultad que conlleva conocer todos sus recorridos y funciones, en este caso el hombro cuenta con un complejo tendinoso en un corto espacio por el que pasa donde se encuentra el arco coraco-acrominal quien se encarga de facilitar toda la movilidad. Existen dos requisitos principales que se contraponen que son la propia movilidad y la estabilidad articular.
A medida que vamos cumpliendo años el riego sanguíneo empeora y la unidad músculo-tendinosa dificulta su actividad con el trabajo cotidiano, provocando micro traumatismos. Al fin y al cabo, las lesiones vienen derivadas del uso y el roce de los tendones que hace que, además de la inflamación, los giros se vayan limitando. Esto sería una explicación a groso modo de cómo se provocan este tipo de lesiones.
El mejor tratamiento recomendado
Un buen fisioterapeuta conoce cada una de las partes del cuerpo por las que pueden estar relacionadas las diferentes lesiones y, para ello, necesita evaluar los síntomas y descubrir dónde está el problema y su conexión. Como ya hemos escuchado alguna que otra vez, el cuerpo humano está conectado desde una punta a otra y eso influye también a la hora de tratar una molestia.
De este modo, el trabajo que realizará el experto será desde las zonas más alejadas, pero a su vez vinculadas con el área en cuestión.
– La columna vertebral:
La parte cervical está relacionada por completo con el hombro y generalmente los bloqueos articulares también afectan las cervicales. La presión de las raíces nerviosas son culpables en alguna medida del desequilibrio muscular que nos lleva a la patología de la tendinopatía. Es clave tratar esta zona para encontrar la causa del problema.
– Musculatura peri-articular:
Otro de los pasos fundamentales es trabajar con los músculos más cercanos a la parte más dolorosa de la lesión para ayudar a destensar y aliviar la rigidez muscular.
– Disfunciones viscerales:
Aunque parezca extraño pensar que un músculo del brazo está relacionado con un órgano del cuerpo con el que, a priori, no tiene relación, es completamente cierto y por ejemplo el hombro derecho está hilado con el hígado. Por tanto, cuando el hígado, encargado de eliminar toxinas y desechos, no funciona correctamente es el hombro el que se ve afectado con inflamaciones.
La disfunción del hígado también influye en el aumento de otros músculos que provocan el mal recorrido de la cabeza del humero, es el caso del aumento de tensión con los pectorales mayor y menor.
La tendinopatía de hombro puede llegar a ser un problema si no cuidamos los movimientos y los excesos en actividades que sin darnos apenas cuenta realizamos prácticamente a diario, en algunas ocasiones incluso podría llegar a convertirse en una enfermedad la cual se arrastraría a lo largo de tu vida, se puede entender como tendinopatía crónica y tendinopatía degenerativa.