Una de las cosas que me apasionan son las frutas y verduras. Hace unos días, paseando por Madrid, pasé por delante de varias fruterías. Me paré a ver que tenían, cómo lo exponen, el orden, los colores y me llamó la atención una de las frutas en concreto, las fresas.

Esas fresas me trajeron muy buenos recuerdos de mi infancia ya que mi madre me traía siempre fresas en primavera.

En los tiempos que vivimos, mucha gente y en especial, los más pequeños no saben qué frutas y verduras son de cada estación ya que es muy fácil disponer de fresas en otoño, melones en invierno y alcachofas en verano. La idea, a priori, es buena pero, ¿no os ha pasado que los tomates no saben a tomate a pesar de lo apetitosos que parecen cuando los compras?

Aquí llega el problema y es que todas las verduras y verduras que no son de temporada no tienen ni las vitaminas ni los nutrientes que poseen cuando si que son cultivadas dentro del periodo que les corresponde.

¡Se nos olvida lo sabia que es la naturaleza!

La naturaleza nos provee de lo que necesitamos en cada estación, por ejemplo, ahora en octubre comienzan las frutas cítricas: naranja, mandarina, limón, pomelo, ¿te has parado a pensar por qué? Porque llega el frío y nuestro sistema inmunológico disminuye, por tanto, para evitar esto, nos provee de frutas y verduras ricas en vitamina C y evitar que nuestro cuerpo enferme.

En verano, las frutas, verduras y hortalizas que nos ofrece son ricas en agua, ya que necesitamos incrementar el aporte de agua en el cuerpo, mayor hidratación para soportar el calor. Frutas como el melón, la sandía. Además, en esta estación debemos protegernos del sol y la zanahoria o el albaricoque y melocotón nos aportan betacarotenos para que nuestra piel esté más protegida.

Pero existen muchos más beneficios que obtenemos por consumir frutas y verduras de temporada. A continuación Enumeramos algunos de ellos.

  • Se reduce notablemente. La naturaleza provee productos cuando el clima es el apropiado por lo que las condiciones climáticas son perfectas para la producción pues nos ahorramos el gasto del transporte, aduanas, mantenerlo en cámaras etcétera.
  • Menor impacto ecológico. El transporte supone la emisión de CO2 a la atmósfera. Cuando las frutas y verduras vienen de otros países, estas emisiones se multiplican ya que.
  • Ayuda a la sostenibilidad del planeta. Evita la implantación de los monocultivos intensivos que provocan un agotamiento en la tierra.
  • Más sabor, nutrientes y vitaminas. Los productos de temporada locales están recogidos en su punto perfecto y óptimo de maduración, en cambio, la que proviene de otros países se recogen verdes, sin madurar y su maduración se hace en los contenedores del transporte empleados.
  • Más ecológicos. Se respeta el ciclo natural siendo, por lo tanto, totalmente respetuosos con el medio ambiente.
  • Ayuda al comercio local. Mejora la economía y ayuda a los puestos de trabajo de mucha gente en nuestro país (pequeño comercio, agricultores, temporeros..).

Por todo esto, te recomendamos que consumas frutas y verduras de temporada.